Nuestro hogar

Voy a adornar nuestro hogar, con mil pétalos de rosas rojas, como la pasión que siento, lo voy a vestir con claveles blancos por la pureza que hay en este sentimiento, voy a colgar tomillo, romero y hierbabuena para que su aroma a frescura se eleve hasta el cielo, unos nardos y unas azucenas, también unas orquideas, margaritas y amapolas, jazmines, sándalos y azahar, clavellinas y campanillas, un par de girasoles, unas hortensias, unos sanpedros, para que este lleno de alegría, así cuando llegue la noche y estés cansado del día, te envuelvan con sus fragancias y sus colores te devuelvan la vida.

Si quieres pondré un hiedra en el portal del hogar y un letrero que diga -NOS AMAMOS DE VERDAD-, en el centro una hermosa fuente de cristal y de coral, para oír el murmullo del agua al caer en su repicar.
Un trocito de arco iris, un rayo de sol y otro de luna, un par de estrellas fugaces, una nube blanca, un poco del mar que nos baña y un poquito de arena de playa.

Ahora ya está adornado, sólo te falta entrar, en este jardín botánico en que vestí nuestro hogar, aquí te estoy esperando para darte......felicidad.

6 Septiembre 2006

Esmeraldas

...y mis ojos fueron esmeraldas brillantes bañadas por un mar salado, ciegos ante la oscuridad que me llamaba.Mi pecho se convulsionaba frenético, ávido del aire que se negaba a entrar en mis pulmones contraidos por el ahogo, ahogo de una impotencia que crecía.Mi boca dibujaba un rictus de amargura y mi cabeza sólo buscaba la luz de la paz eterna.Por un momento encontré esa luz rodeada por tinieblas, las mismas que me llamaban incesantemente a las que cada vez me abrazaba con más fuerza, más convencida que era lo mejor para todos, incluso para mi. Fue en ese instante cuando él apareció sosegando mi angustia sin palabras, tan sólo con su presencia, mis ojos seguian siendo esmeraldas brillantes, pero me alejaba de las tinieblas y exorcitaba mi alma de caer en la tentación de la salida fácil del adiós.

Gris

Hace calor y truena, llueve, el día está extraño como yo, ando malhumorada sin una razón concreta, quizá sean las hormonas, (estoy en esos días), quizá el aburrimiento, o quizá la añoranza que empieza ha hacer mella.

Estoy gris, quisiera poder cerrar la puerta tras de mi y marcharme a un lugar tranquilo, me ahogo, pero aún no he hallado ese sitio donde encontrarme con mi soledad unos minutos y llorar o reír a mi antojo, o simplemente cantar al compás de la música en el coche.

Si, estoy gris y recuerdo a mis niños, me siento tan hueca, tan vacía... viendo la televisión apareció una escena en la que una mujer daba a luz, sin poder evitarlo empecé a llorar, como lloro ahora al recordarlo, me sentí tan fracaso, tan desolada, tan lejos de lo que soñaba cuando era una adolescente, recordé las sensaciones de ese momento y quise abrazar a mis bebes de nuevo, cosa imposible, el tiempo no se detiene, no espera por nadie, pasa inexorable, ellos ya no son bebes, son dos hermosos niños que ahora no están aquí.

Estoy gris, me siento fea, ni siquiera me atrevo a ver mi reflejo en el espejo, me veo mal, aunque puede que sea este calor que me tiene muy desganada, o que realmente estoy deprimida y no quiero aceptarlo, un poco cansada de ser la que se levanta y zarandea todo lo que me rodea para que se ponga en marcha el engranaje de la vida.

No lo sé, solo sé que estoy gris como el día, pero... pronto llegará la noche, mi amiga, mi aliada, mi momento de silencio, mi cómplice, ya no estará el día gris, ya solo habrá... oscuridad.

Suelto mi lastre...

Una vez yo también me vestí de blanco, de eso hace ya muchos años, ilusionada y feliz porque tonta de mí creí, que con él había de morir y no fue así, se me acabó el amor y un gran cariño sentí y por ello antes de engañarlo separarme decidí.

No era el mío, ni el siguiente, ni el que vino después, aunque todo de mí di, el mío llegó hace un tiempo y su nombre es Luís.

¿Lo conoces?... sí, te pregunto a ti, a ti que sé que me lees y como ves yo también un paseito me di, ya que tu invitación recibí, pero debiste tener cuidado al decidirte a escribir, porque cuando lo atacas, me atacas a mi y eso no te lo voy a consentir.

Lo dañaste, lo abandonaste cuando a su lado debías estar, eso no se hace cuando amas de verdad, ¿y tú le llamas cobarde? Pues mira ahora donde está, recuperado, con fuerza, con ganas de volver a empezar, es un diamante en bruto que no supiste tallar, lo tuviste en tus manos y lo dejaste escapar tal vez pensando que era un simple cristal.

De mentiras has llenado a quien te ha querido escuchar y a la altura del fango lo has querido dejar, pues bien hoy te diré que hombre mejor no hallaras, porque hombres como él no quedan ya.

No pienses que son tus sobras lo que me voy a llevar, no es así, nada más lejos de la realidad, encontré a un hombre con muchas ganas de amar, con ganas de ser amado, pero de verdad, eso es lo que le ofrezco, no puedo ofrecerle más, lo demás vendrá con el tiempo, lo demás ya llegará, pero de momento tenemos felicidad.

Ya tienes lo que querías, pasta gansa y libertad, ahora sólo te pido que nos dejes vivir en paz, que te olvides que existimos porque tú… no existes ya, formas parte del pasado y eso no vuelve más.

No quiero empezar una guerra, pero quería que supieras, que sé lo que hiciste y lo que no… también, que callo mucho de lo que sé sobre todo por él, no soy quien para juzgarte, yo no te deseo ningún mal sólo piensa una cosa… lo que diste, recibirás, ser tu amiga no puedo, como bien comprenderás, porque si algo no tengo es falsedad.

Shhhh silencio

Silencio, el ir y venir de gentes se apaga, las farolas encendidas alumbran las calles para proteger a los temerosos de sus angustias, de sus miedos, de las aves nocturnas que acechan en las sombras.

Shhhh silencio, todos duermen, tan solo yo estoy despierta mirando hacia la nada, buscando inconscientemente el horizonte que se pierde en la oscuridad, imaginando la linea que separa el cielo del mar.

Silencio, dejo a mi mente navegar entre recuerdos que me devuelven sensaciones ya vividas y traen a mi lado seres que se encuentran lejos, pero aún así me hacen esbozar una sonrisa.

Shhhh silencio, calma, silencio... me voy a la cama.

En la oscuridad

En la oscuridad de la noche, cuando todo esta en silencio, vienen a mi recuerdos de otros momentos, de otro tiempo, cuando calladamente se filtra en mi cama la soledad, sabiendo que el mañana es incierto, cuando la tristeza invade mi alma lánguidamente y por mis mejillas discurren las lágrimas, me pregunto que ha pasado con mi vida.
Cuando pienso en lo que es el amor sin sufrimiento,
me doy cuenta de que no existe, cuando se ama se sufre entonces ¿he de renunciar al amor para no sufrir?, cuando el dolor se apodera de mi esencia y todas mis creencias se desmoronan, cuando llega a mí la desesperanza clavándose en mi sentir como una daga afilada y comprendo que no he de esperar nada, cuando mis brazos se entrelazan sobre una almohada vacía y la estrechan con fuerza, cuando mi cuerpo siente el frío de la ausencia, cuando mis pulmones se llenan de aire que exhalo en un suspiro, sintiendo que así mi pesar es más ligero, cuando todo mi ser se niega a seguir viviendo, entonces… me quedo dormida.

26/02/2006